quarta-feira, 24 de agosto de 2011

Jorge Manrique

1.


Recuerde el alma dormida,
avive el seso y despierte
contemplando
cómo se pasa la vida,
cómo se viene la muerte
tan callando;
cuán presto se va el placer,
cómo, después de acordado
da dolor,
cómo, a nuestro parecer,
cualquiera tiempo pasado
fue mejor.

(in Coplas, ed. de Amparo Medina-Bocos, ed. Edaf, Madrid, 2007)

Nenhum comentário:

Postar um comentário